Fueron doce días intensos lo que Fabrice Michel pasó en la región de Antofagasta, doce jornadas en las que recorrió paisajes desolados por la contaminación, sostuvo entrevistas con protagonistas de diversas áreas científicas, mineras, académicas y representantes de pueblos originarios, participando como “explorador” de las manifestaciones sociales callejeras de la ciudad, absorbiendo una realidad que perfiló una serie de reflexiones en torno al ahora o nunca que vive nuestra región y nuestro país.
El artista conceptual francés, con más de 20 años de trayectoria y que por primera vez visitaba Latinoamérica, participó de una residencia de investigación, gracias a la colaboración entre SACO y el Instituto Francés en Chile, la que tendrá como fruto una exposición que será parte del circuito museo sin museo de la novena edición del Festival de Arte Contemporáneo en el Desierto de Atacama que se llevará a cabo entre septiembre y noviembre de 2020.
-¿Qué sientes al recorrer este paisaje, el desierto, y ver estos espacios invadidos por los desperdicios y contaminación generados por la industria?
“Para un artista esto es como un supermercado de perfiles, formas y texturas, pero eso es desde un punto de vista estético, y ese es el problema de la belleza, no ves las cosas como son y lo que hay acá es basura, y eso no es bueno para el medio ambiente y la naturaleza. Es una señal de consumo, un crimen y un desastre. Las industrias y compañías aquí en Chile, no se preocupan de lo que producen, no toman la responsabilidad sobre el impacto de estas acciones en el medio ambiente y tiran sus desechos aquí, en uno de los más bellos paisajes del mundo, arruinándolo con esta concepción de sociedad industrial. En otras partes del mundo, como en Europa, hay muchos esfuerzos por reciclar y hacer las cosas de forma limpia, pero la realidad es que la mayor parte de la basura es enviada a otros lugares del mundo, lo que es solo poner el problema en otra parte, así es que creo que globalmente no sabemos qué hacer con lo que producimos, no sabemos dónde deshacernos de todos estos desperdicios”.
-Visitas Chile en un momento crucial de las movilizaciones sociales…
Es muy conmovedor. Fui a una de las protestas porque hay cosas que uno puede conocer por televisión, y otras que debes vivirlas, estar ahí. Quise participar aunque solo fuera como un explorador, pero es bueno ser parte de esto de alguna manera. Lo que pasa por mi mente es que todas estas temáticas, como los derechos de las mujeres, problemas de corrupción, la dignidad de la gente, el medio ambiente, son las mismas en otros países, incluso en Francia. Es como si a nivel mundial la gente estuviera tomando conciencia y aquí es muy extremo y fuerte. En Francia tenemos a los “chalecos amarillos” y protestas donde también ha habido violencia, con gente que ha perdido la visión, pero no puedo compararlo con lo que pasa en Chile, porque aquí la violencia de la policía es mucho más grande. Pero son los mismos problemas en todas partes, y Chile es uno de los ejemplos más extremos de eso.
-¿Qué significa para ti el concepto curatorial de SACO9?
Es difícil decirlo. Pienso que cada momento debe ser un “ahora o nunca” y pienso que debe haber un “ahora o nunca” en el pasado, y un “ahora o nunca” en el futuro. Estas palabras son interesantes porque se pueden invertir. Puedes decir “no me gustan las cosas como están ahora” o “voy a actuar ahora”, o puedes decir “nunca pasará esto otra vez” o “nunca haré algo así”. Estas palabras pueden ir hacia adelante o en reversa. Probablemente estamos viviendo un momento histórico que nadie sabe cuánto durará,si se apagará pronto o si seguirá creciendo, lo que creo que pasará, pero lo importante es que lo estamos viviendo ahora y debemos actuar ahora.
*Debido a la contingencia sanitaria que afecta a nuestro país y el mundo, SACO ha recalendarizado sus fechas entre septiembre y noviembre de 2020. Más detalles aquí.
